Qué seguro tiene que estar este tío de su bella esposa, cuando es capaz de compartirla con un colega sin que su matrimonio se resienta. No es que le vaya el sexo en grupo, pero quiere presumir de esposa caliente; y con este amigo tiene la suficiente confianza para demostrar que su mujer es una diosa del sexo. Así que la casada viciosa se encontró con que su agradecido marido le había montado un trío, nunca le había dado una soprpresa así; por eso ella se esmeró en satisfacer a los dos, incluso cuando le hacían una doble penetración. Y ser corrida por las dos pollas fue más que suficiente recompensa para ella.